Ser, hacer, tener
El ser humano siempre ha tenido un conflicto entre estas tres vertientes: lo que soy, lo que debo hacer y lo que tengo. Y siempre ha intentado buscar el equilibrio entre estos 3 verbos.
Mucha veces el ser humano deja el ser para concentrarse en el tener y en el hacer, otros sin embargo hacen lo contrario y se concentran en otras cosas. El ser es lo que soy como persona que pertenece a una sociedad, el hacer son las acciones que realizo ya sea trabajo, escuela, universidad... y el tener que es ese deseo que te lleva a una ambición de querer más y más sin conocer límites. Las ideas humanistas colocan al ser humano como el centro de todo, aquel ser que lo puede todo, aquel ser que domina y gobierna a la naturaleza.Con la revolución industrial ocurrió un impacto en el hacer y se olvidó de cierto modo del ser, de ese ser que está con su familia, de ese ser que dedica no solo tiempo a su trabajo y a su familia sino también a la sociedad. Además con esta revolución la producción aumentó y por consiguiente el trabajo y las exigencias aumentaron, las horas de trabajo se hicieron cada vez más y las horas en familia se hicieron cada vez menos.Sin embargo este hacer no está muy distante de lo que es el tener pues si hago mucho por lógica tengo que tener mucho, esto es en lo que consiste la sociedad de rendimiento en crear personas que son maquinas del trabajo y seres que aumentan su rendimiento para obtener más riquezas y beneficios.A veces este ser necesita un stop porque una cosa es tu capacidad de producción y tu producción si tú sobrepasas lo que puedes producir esto va a hacer que tengas más estrés y vas a hacer por causa y efecto que tu capacidad de producción sea más pequeña de lo que era antes.
Debemos entender que el ser humano no es algo divino ni es una máquina de hacer pero tampoco es una máquina de tener ni de ser sino; que es una pequeña combinación entre todos estos elementos. Por lo tanto invito a que eduque al ser para que haya un equilibrio y las cosas fluyan sin estrés y sin presión de querer más, de no tener tiempo a tu familia y de estar con tu yo interior. Enfoquémonos en las cosas que no son materiales porque en fin y al cabo uno como persona no tiene nada pues la muerte te separa de lo que crees que tenías de lo que creías que hacías y de lo que creías que eras.
